
Desde el año 2008, inicios de la crisis, el crédito bancario en España ha experimentado una notable contracción. Se ha reducido ostensiblemente tanto la demanda como la oferta crediticia.
Una de las explicaciones de este fenómeno podría encontrarse en la aparente inhibición de las entidades, a otorgar créditos a hogares y empresas. Desde la perspectiva bancaria, podrían explicar el fenómeno, desde otro punto de vista, una insuficiente demanda de financiación, y sin las garantías mínimas de solvencia crediticia.
Teniendo en cuenta la actividad económica española y el crédito has seguido una misma tendencia descendente en los últimos años. Parece justificado pensar que son varias las circunstancias que han influido tanto en la demanda como en la oferta crediticia.
Una de las consecuencias a esa baja demanda de solicitudes de operaciones crediticias, se la podemos atribuir al desplome del sector inmobiliario en España. Se paralizaron las promociones y las ventas, encontrándonos con un panorama poco alentador, ya que el sector privado en España era el más endeudado del mundo en relación al PIB.
A pesar de las diferentes reducciones por parte de Banco Central Europea del índice de referencia aplicable y revisable a la mayoría de los créditos en España, el Euribor, no tuvieron un efecto notable. El excesivo endeudamiento por parte de hogares y empresas, y la desvalorización de las garantías, hicieron que esas medidas apenas tuvieran efectos positivos para un aumento en la demanda de nuevas solicitudes de crédito.
En cuanto a la oferta es importante destacar, el periodo de revolución vivido en el sector bancario, obligada por los problemas de solvencia y liquidez de algunas entidades, que derivaron en fusiones y adquisiciones. Estos movimientos obligados en el sector bancario, trajeron consigo la necesidad por parte de las entidades de sanear sus balances y modificar sus estructuras, afectando por lo tanto a la oferta crediticia.
La misma situación económica del país es una evidente explicación al fenómeno de la paralización del crédito. Tanto hogares como familias, que gozaban de buena salud económica, vieron como sus fuentes de ingresos menguaban, trayendo consigo graves problemas de endeudamiento, reduciendo su capacidad para devolver los créditos y produciendo un aumento notable en los niveles de morosidad de hogares y empresas. Sumándose la desvalorización de los activos que servían como garantías a esos créditos.
Aunque la realidad sigue siendo que un alto porcentaje de hogares y empresas siendo teniendo dificultades para hacer frente a las obligaciones contraídas en periodos anteriores. Y la actualidad de la economía española, a la par que la del crédito parece que experimentan una evolución, positiva, aunque muy lenta.
Es importante mencionar, que el saldo de créditos en los balances bancarios viene minorado por el volumen de operaciones amortizadas y no renovadas a su vencimiento. También habría que añadirse los créditos fallidos, que desaparecen de los balances de las entidades o son sustituidos por los activos que actuaban como garantía.
No obstante, la recesión ha influido de forma desigual según qué sectores. Algunos, como el inmobiliario, han sufrido consecuencias devastadoras. Otros, donde se han llevado a cabo ajustes importantes, están empezando a disfrutar de financiación.
Se podría afirmar que existe una gran escasez de oferta crediticia para iniciativas emprendedoras en España, iniciativas muy importantes para el crecimiento de la economía española. Es importante mencionar, que la financiación de las startups no debería ser exclusiva de la banca comercial. Durante los últimos años nuevas mecanismos o formulas de financiación han aparecido en el mercado financiero, estamos hablando de fondos de capital riesgo, business angels, y las diferentes formulas de financiación colectiva que han nacido a partir del crowdfunding, es el caso del crowdlending, donde inversores privados y empresas encuentran nuevas fuentes de financiación unos y rentabilidad otros.
Otro aspecto importante, está en un análisis riguroso del riesgo de cada solicitud de crédito. El análisis del riesgo o scoring crediticio, es el mecanismo utilizado por las entidades bancarias para autorizar o rechazar una solicitud de crédito. Es importante tanto para hogares como empresas, planificar y prever sus diferentes necesidades de financiación. El primer análisis del riesgo debe hacerse previo a la solicitud del crédito, cada hogar o cada empresa, debe estudiar detenidamente sus niveles de generar recursos y su capacidad de hacer frente a las obligaciones. Creemos importante tomar políticas de crecimiento sostenible y niveles de endeudamiento razonables.
Mientras que la recuperación del crédito parece haber iniciado una lenta y paulatina mejoría. Desde un punto de vista más cercano y particular, tanto hogares como empresas, debemos seguir haciendo un esfuerzo voluntario importante en nuestro día a día, ilusionarnos y motivarnos, por alcanzar nuestros objetivos y metas.
Francisco Javier Cabrera Llamas